Escanear la ciudad

Entrevista a Guillermo de la Madrid

El próximo 12 de octubre se clausura  Arranquismos, parcheados y sobreinformación, la exposición fotográfica de Guillermo de la Madrid que hemos disfrutado en las paredes de La Fonda desde el mes de abril.
Guillermo de la Madrid es uno de los fundadores de Madrid Street Art Project, un proyecto tan necesario como fantástico, por su capacidad canalizadora y de visibilización del arte urbano emergente, y por el cual  nos conocimos precisamente en Madrid en la edición inicial de Urvanity allá por el año 2017. Desde entonces he sido un acérrimo seguidor de su obra fotográfica, volcada en su perfil de instagram bajo el  nick @guilloso, ya que me resultan fascinantes los motivos y encuadres que elige. Imágenes que registran lo cotidiano a través del azar, de lo absurdo, de la acción diaria de una ciudad que se transforma, que muta a traves del accidente casual o provocado, en retratos del tiempo que vivimos.
Personalmente ha sido un placer poder exhibir esas obras dentro del proyecto que representa Mambo Gallery y con motivo de esta clausura que se acerca, rescato una conversación mantenida por correo mientras preparábamos la exposición y  en la que Guillermo da algunas claves para acercarnos su obra.

P. Cuando empezaste a sacar fotos? Con anterioridad a la etapa de MSAP, o precisamente la gestión de ese proyecto es la que te lleva a la fotografía.

R. En realidad podríamos decir que MSAP es una consecuencia de mi uso de la fotografía para documentar el arte urbano en Madrid desde principios de los 2000 (2001, concretamente). Ten en cuenta que MSAP nace en 2012 y mi blog, Escrito en la pared, en 2006. Antes de todo esto tenía cierta afición a la fotografía, tal vez heredada de casa (mi padre tenía cámara, y en mi infancia tuvo un pequeño laboratorio en casa donde aprendimos a revelar y demás), pero nada significativo ni con un carácter concreto ni un objetivo definido… Cuando empiezo a ser más consciente de un tipo de fotografía concreta (ahora que lo pienso bastante documentativa, tal vez incluso un poco plana, un poco como la que hago ahora de las cosas de la calle) es cuando me pongo a documentar exhaustivamente el arte urbano de las calles de Madrid, hacia 2001. Más adelante sí buscaré un poco una fotografía más cuidada, menos plana, principalmente al registrar las acciones de los y las artistas y no tanto los resultados.

P. Recuerdas un momento/ motivo de revelación donde tomaste conciencia de lo que estabas haciendo? Me refiero al concepto de foto que vértebra las exposiciones, más allá del registro documental de graffitis o muros.
R. No tengo un recuerdo claro de ese momento, pero sí puede que esté vinculado a algunas excursiones periféricas en busca de spots de graffiti (no tanto arte urbano) en las que acababa fotografiando no solo esos spots sino cosas, espacios, en los alrededores de esos spots o de camino a ellos, que me llamaban la atención. Al final estas excursiones no eran hacia un lugar ya conocido y ubicado, sino que eran un poco a la aventura, con lo que mi mirada estaba continuamente atenta a lo que podía surgir en el camino. También es verdad que este escaneo continuo y exhaustivo de la calle, o del exterior, lo venía haciendo desde mi interés por el arte urbano, y al final en ese proceso de escanear la ciudad hay muchas cosas y algunas acaban llamándote la atención de otra manera. Ahí puede estar el origen. ¿Cuándo fui más consciente y empecé a hacer las fotos que hago ahora? No lo tengo claro. A veces pienso que no hace tanto y de repente me encuentro fotos antiguas en las que ya están esos intereses…
P. Como te tomas el hecho de este tipo de fotografía? Pasatiempo, necesidad, rutina, divertimento?
R. Tiene un poco de todo esto. Está muy (o totalmente) vinculado a mi rutina. Cuando me interesaba documentar solo el arte urbano sí salía más a propósito a hacer fotos («me voy a hacer la calle», le decía a mi chica, y me iba a buscar lo que hubiese de novedoso en la calle). Ahora no, mi experiencia con la foto está siempre vinculada a mis movimientos diarios y cotidianos por la ciudad. No busco, encuentro pero sin buscar. Al mismo tiempo es todo lo que dices: pasatiempo y divertimento (la palabra juego define muy bien mi experiencia en este sentido, disfruto mucho con esos momentos y esos encuentros). Y necesidad, pues no como algo forzado, pero en realidad sí la siento muchas veces, si un día no he salido de casa, sí necesito aunque sea un pequeño paseo, y ese pequeño paseo implica la posibilidad de encuentros con cosas que registrar (me gusta esta palabra, tiene ese punto de fotografiar sin querer que las fotos tengan un interés por sí mismas, de reflejar solo ese momento/lugar). Así que sí, en diferentes grados pero mi experiencia con este tipo de fotografía tiene un poco de todo lo que comentas.
P. Sabes aproximadamente cuántas fotos has hecho en estos años?
R. Buf, no. Miles, diría…
P. Alguna serie favorita dentro de tus temáticas?
R. Son diferentes, no creo que pueda decantarme por ninguna, Tal vez los arranquismos, las de sobreinformación y los parcheados porque llevo mucho tiempo haciéndolas, pero luego de repente engancho locamente con series como los palos de escoba o la caja y me lo paso pipa porque son «nuevas». En realidad como lo que me motiva mucho es la experiencia puedo disfrutar de manera distinta de un arranquismo, un palo de escoba o un parcheado, a veces depende del «encuentro». Por ejemplo, la imagen del primer cartel que hemos sacado fue brutal, no por ser de esa serie, que también, sino por el número de capas, las imágenes que se generaban en él, incluso el hecho de estar con alguien concreto en ese momento.
P. Ética o estética a la hora de tomar una foto? Desde mi punto de vista el concepto estético subyace claramente en la toma de imágenes pero es el único o principal fundamento?
R. Depende de la serie. En los arranquismos hay mucho peso de lo estético, busco un encuadre concreto, miro bien la composición… En el resto pienso menos: por ejemplo, en desinformación si es foto desde el coche me da igual; si estoy a pie de calle sí cuido el encuadre, que las líneas de la foto vayan paralelas a la de la valla/cartel; lo mismo con los parcheados. Sin embargo, en los palos de escoba y la caja, por ejemplo, hay otra «ética»: la foto de toma según se produce el encuentro, sin re-encuadrar, hay cero estética, es puro registro. Las fotos que forman la expo en Pontevedra tienen bastante componente estético, pero porque pertenecen a series que lo tienen. Si fuesen otras series serían diferentes, digamos que no hay un posicionamiento general a la hora de hacer las fotos, depende de lo que vaya a registrar.
P. Manejas algún referente, autor, autora,  fotógrafo con el que relaciones tu obra?
R. La verdad es que no mucho, o por lo menos no como algo que me haya influido en lo que hago. Sí sigo a muchos fotógrafos que hacen un tipo de fotografía cercana a la mía, o que tienen una visión parecida de estos encuentros con entidades de los que tanto disfrutamos. Por mencionar algunos referentes, están Joost Markerink instagram.com/joostmarkerink, Lorenzo Serraglia instagram.com/serra_glia que además tiene una serie de libros (The City is Ours) interesantísimos: instagram.com/thecityisours_bookzine, Matthias, un fotógrafo alemán: instagram.com/mapa305, páginas de IG como instagram.com/gangculture, o instagram.com/andys_eyes... Nunca he sido tampoco de seguir a fotógrafos o de tener libros de fotografía y ahora me estoy aficionando un poco más. De un tiempo a esta parte me interesa mucho el trabajo de Ricardo Cases, que además ha ayudado a quitarme ese rechazo que tenía del uso del flash…
P. ¿Podrías explicar brevemente el título/concepto de tu anterior exposición «Sin ninguna intención»?. Título que desde mi punto de vista encierra toda una filosofía detrás de la toma de imágenes.
R. Sí, está vinculado a esa idea de registro, de no querer intervenir o pensar demasiado en cómo se toma la foto. También está muy relacionado con esa falta de intención de la que hablaba antes: son cosas que me encuentro, que no voy a buscar, no hay una intención por ir a registrar una cosa u otra sino que son cosas que me encuentro en mi rutina.
P. En algún momento previo a tu primera y reciente muestra en Espacio Amazonas pensabas en la posibilidad de mostrar tu trabajo al público a través de una exposición?
R. De alguna manera siempre ha estado ahí (durante mucho tiempo con las fotos de arte urbano, tanto de registro de piezas como de acción de los artistas, y más tarde con otro tipo de fotos), y siempre he tenido a gente detrás (familia, amigos, conocidos…) diciéndome «la expo para cuando», «el libro para cuándo» pero siempre lo he ido dejando. La primera expo nació de un momento divertido y algo absurdo, después de una presentación en Swinton Gallery, salió de nuevo el tema y Lina y Nati de Dúo Amazonas y Esquie se aliaron y entre cervezas me hicieron firmar en una servilleta un contrato por el que haría una expo en el espacio que ellas dirigen en Madrid. Y aquello de alguna manera me forzó a cumplir, pero sin ese empujón no lo habría hecho o habría tardado mucho más en dar el paso. Una vez dado ese paso… Ahora Esquie anda detrás de mí para que haga un fanzine, o varios. Supongo que en algún momento me animaré, pero seguro que también necesito un poco de presión.

La exposición se puede visitar de miércoles a domingo en el horario de La Fonda,  de 12:30 a 16:30 y 19:30 a 23:30.

Calle Isabel II, 6. Pontevedra